En vísperas del día del trabajo en México, es imposible no reflexionar sobre si lo mejor es trabajar en lo que nos gusta o hacer que nos guste nuestro trabajo.

El trabajo es una de las actividades en las que pasamos la mayor parte de nuestro tiempo, de ahí la importancia de que éste sea de agrada y disfrute. Obtener ingresos de la actividad a la que nos dedicamos es el principal beneficio de estar activo laboralmente, sin embargo, un salario, ingreso o sueldo no es lo único que debe interesarnos de un trabajo.

Tener estabilidad laboral ayuda a mejorar nuestra calidad de vida respecto al acceso a servicios de salud, educación, servicios básicos, cultura, y por supuesto, de recreación. Pero en nuestro ambiente laboral también se deben cubrir ciertas condiciones para que el desempeño sea eficiente.

Hacer que te guste tu trabajo

¿Habías escuchado el concepto del salario emocional? Se trata de todas esas remuneraciones que no son económicas pero que aportan al bienestar y desarrollo personal y que aportan a la calidad de vida.

En estos tiempos tener un buen sueldo no es suficiente para cumplir las metas que nos hemos trazado. El ambiente laboral, sentirse parte de algo, amar lo que se hace, sentirse valorado, que exista motivación para seguir creciendo personal y profesionalmente, trabajar menos horas, tener horarios flexibles o ser dueño de tu propio tiempo e ingresos, son las necesidades más importantes dentro del salario emocional.

¿Cuáles son sus beneficios?

Al trabajar en algo que cubre tus necesidades circundantes a tu bienestar, tu vida mejora en distintos aspectos como: 

1-Evitas la inestabilidad laboral- tu permanencia en el empleo se extiende.

2-Aumentas tu productividad- al estar motivado, mejora tu rendimiento en él.

3-Te involucras y creces-  cuando te sientes valorado te comprometes con lo que haces lo que te impulsa a seguir aprendiendo más y trazarte objetivos.

Cuando se cumple con las condiciones en las que puedes sentirte contento con tu lugar de trabajo, es muy sencillo que te guste o ames lo que haces.

Trabajar en lo que te gusta

Hacer lo que te gusta y que eso te genere ingresos da muchas satisfacciones:

-Sentirte satisfecho contigo mismo.

-Mejora tu salud mental.

-Estás motivado.

-Eres feliz.

-Te ven como inspiración.

-Lideras.

-Aprendes.

-Eres productivo.

Muchas de las veces, aún cuando te gusta el ambiente laboral, lo que haces no te gusta o no te apasiona. Si tu trabajo te ayuda a vivir cómodamente, pero te falta pasión, puedes hacer de tu pasión tu segundo trabajo o autoemplearte.

Echa mano de las nuevas herramientas tecnológicas para complementar esa parte de la satisfacción personal, ya sea para generar un ingreso extra, para desarrollar tus habilidades o creatividad, ejercer tu carrera o simplemente aprender algo nuevo, y qué mejor que ganar dinero con ello.